La arquitectura para ser el humano lejos de ser un lujo es una necesidad, pero cada vez son mayores los desafíos frente a los cuales los profesionales de esta disciplina se encuentran, en una sociedad que exige cada vez más. La arquitectura sostenible ha pasado a primer plano sobre todo en países del primer mundo, buscando otorgar una solución a las demandas de empresas más amigables con la naturaleza.

En conversación con la Arquitecta Rosa Ugarte, docente de la Universidad Columbia y especialista en desarrollo sostenible, nos comenta más en relación con proyectos sustentables.

“El desarrollo sostenible tiene que ver con cómo podemos utilizar en primer lugar, el tema de los recursos naturales y de cómo a partir de los mismos podemos realizar un desarrollo en todos los ámbitos. Anteriormente se tenía el concepto de desarrollo únicamente con relación al desarrollo económico, abarcando hoy un plano mucho más amplio”.

“El uso racional es para que podamos dejar un legado para las siguientes generaciones”.

Se podría decir entonces que el término “desarrollo” ha desplazado al de “explotar”, involucrando a toda la actividad humana: social, económica y una larga lista de etcéteras. Pero en términos de arquitectura y su relación con la naturaleza, en Paraguay ¿se logra el objetivo del desarrollo sustentable? Rosa establece que ésta incógnita, presenta una importante dificultad a nivel mundial y no sólo en nuestro país. Desde el término hasta la aplicación del mismo, hablar de sostenibilidad es algo relativamente nuevo. En contrapartida, si bien estamos atrasados en este escenario, cabe resaltar que el Paraguay no se ha visto afectado por la industrialización y sus consecuencias que afectan a otras naciones; la verdadera necesidad está en trabajar con industrias limpias.

“Cuando hablamos de la industria limpia estamos hablando de industrias que no contaminan el ambiente, industrias sin chimeneas”.

“Por un lado está la industria que genera, por ejemplo, actividades como el turismo. Entonces ahí hablamos de actividades que no precisan contaminación ni de empresas que tienen un proceso para elaborar productos que si dañarían al ambiente y por el otro lado está también todo lo que tiene que ver con los procesos industriales propiamente dicho que hoy se está trabajando para que el daño sea mínimo”.

Entre sus declaraciones, la Arquitecta destaca la labor que hoy en día ocupa un lugar importante en lista de prioridades en cuanto a la industria limpia: los desagües cloacales y su tratamiento previo antes de desembocar en nuestros ríos.

Si bien en Paraguay existe apoyo por parte del gobierno, “lastimosamente esos temas no tienen visibilidad como otros temas, entonces es difícil cuantificar el impacto a simple vista”, comparte Rosa.

Las instituciones que se encargan de velar por el medio ambiente se rigen por la política ambiental nacional que establece ciertos objetivos y para alcanzarlos necesita de la intervención de la gestión ambiental que debe realizar acciones que permitan la organización y manejo de los espacios, recursos naturales y humanos, respetando las condiciones ambientales. "Eso tiene que ver mucho también con un nivel cultural que es muy importante trabajar, no solamente impulsar ciertas políticas de acciones sino también un poco desde el punto de vista cultural", agrega la Arquitecta.

La concientización, entonces, es un pilar fundamental al momento de aplicar acciones relacionadas a la sustentabilidad y más aún en países como el nuestro, el cual todavía hoy enfrenta problemáticas que tienen que ver con la contaminación por parte de la ciudadanía en sí, antes de cómo parte del proceso de industrialización.

"Éstas son cuestiones que tarde o temprano tendrán que ser instaladas y abordadas; es un proceso a mediano y largo plazo".

Con miras al futuro, la Arquitecta agrega un pensamiento final "que el proceso sea más rápido o más lento ya depende de cada uno: a veces queremos cambiar al mundo, pero ese cambio comienza también por uno mismo".