La ilustración es sin duda una de las ramificaciones del diseño gráfico que encuentra más adeptos dentro de la juventud que sueña algún día convertirse en profesionales del diseño y la comunicación. Sin embargo, nuestro mercado aún debe madurar mucho respecto a la valoración real de lo que el trabajo profesional de ilustración significa.

Hemos conversado al respecto con Kike Olmedo, un referente inobjetable de la ilustración paraguaya y docente de Diseño Columbia.

Yo puedo decir que vivo de esto, vivo de la ilustración, realmente se puede, pero a mí me costó 20 años de estudios.

“Analizando un poco con mis colegas llegamos a una conclusión de que estamos en la era del entretenimiento, con todas estas aplicaciones para los teléfonos, los juegos, el cine, hablamos de mucha gráfica, estamos en un momento muy especial para la ilustración, ahora con la era digital la ilustración tiene muchas más oportunidades”.

Kike Olmedo reconoce que el campo para la ilustración es muy amplio, y que el escenario hoy día es más favorable para explotar este recurso gracias a los avances de la tecnología que generan nuevas oportunidades: “Gracias a la oportunidad que nos da la tecnología yo puedo vender un trabajo a Ucrania -por ejemplo- o en Holanda me pueden pedir una ilustración.”

No obstante, Kike aclara que en nuestro mercado aún falta madurar sobre lo que cuesta un encargo: “En Paraguay hay mucha demanda de ilustración y gracias a Dios a mi no me falta trabajo, pero si es un problema aún el pago por el trabajo en el plano local, aunque en contrapartida podemos vender nuestros trabajos afuera y allí se paga muy bien. Por ello creo que la tecnología nos ayuda muchísimo, el cliente te pregunta ¿Cuánto va costar una ilustración? y luego piensa que a uno no le cuesta nada, que es sólo un dibujito… pero en realidad, llegar a ese dibujito lleva mucho trabajo. Yo puedo decir que vivo de esto, vivo de la ilustración, realmente se puede, pero a mí me costó 20 años de estudios, yo me preparé para esto y no sólo en la universidad, la formación independientemente a la universidad, el desarrollo personal y el interés que le des a tu profesión también es importante”.

Kike resalta que el trabajo nacional es valorado en el exterior y que eso si resulta muy auspicioso para los profesionales locales: “Cruzás la frontera del lado que vos quieras, Bolivia, Argentina o Brasil y te enconarás con otra la forma de ver al ilustrador, pero ahí no mas, a metros de cruzar la frontera la historia cambia de manera increíble. Ahora mismo yo estoy trabajando para gente de Italia, desde Paraguay, estoy haciendo cómics”.

Yo siempre digo que el ilustrador que es diseñador gráfico está un paso adelante frente a cualquier otro ilustrador.

Para finalizar la nota, nos comenta como ve a los jóvenes estudiantes que desean introducirse al mundo de la ilustración: “Yo estoy sorprendido porqué he enseñado en varias instituciones e incluso en mi propio instituto, por lo que siempre veo gente, aquellos que van a mi instituto son gente más preparada, gente que ya tiene ese don que sus padres le descubrieron o que ya hicieron cursos y están en el entorno. Pero en la universidad te encontrás con gente nueva, gente que no está dentro del ámbito. Pero me di cuenta que de cada 10 alumnos, al menos 5 ya están preparados para ilustrar, tienen el concepto del espacio y de la forma, realmente creo que hay un buen nivel como para dar el siguiente paso. Yo siempre digo que el ilustrador que es diseñador gráfico está un paso adelante frente a cualquier otro ilustrador, por el concepto que tiene de las cosas, el concepto de las formas".