La experiencia inició en abril y se extendió hasta el mes de agosto, Columbia da sus primeros pasos para un proyecto de educación inclusiva, para jóvenes que no solo añoran una oportunidad de formarse en nuestro país, sino que también desean mostrar que la inclusión es posible y hay compromiso de por medio.

El taller propuesto fue Diseño de Displays POP, que trata del diseño y desarrollo de exhibidores, totems y displays de productos para puntos de venta, el taller estuvo a cargo del diseñador peruano y profesor de Diseño Columbia Daniel Julcamanyan, especialista en el diseño de displays para puntos de venta.

Conversamos con Camila Cella, estudiante de Diseño Columbia, para que nos cuente su experiencia en el primer taller inclusivo de Columbia.

¿Qué te pareció el taller?

Muy bueno, tanto la experiencia de compartir con gente que tiene capacidades distintas como también la parte académica, me sirvió muchísimo ya que previamente tuve la cátedra de packaging, y eso me sirvió para poner en práctica esos conocimientos con los exhibidores.

¿Qué es lo más importante que aprendiste?

Todo, porque para mí fue algo totalmente nuevo experimentar con compañeros sordos. Al principio me pareció muy extraño pero a medida de que pasaban las horas quedé muy sorprendida.

Es increíble ver como hay personas que tienen otras capacidades a las nuestras pero aún así, eso no es impedimento. Lo que más resalto es la experiencia de haber trabajado con compañeros que poseen mucho talento.

En este tipo de talleres te das cuenta de que todas las personas pueden hacer las mismas cosas o  incluso mejorarla y que no tiene nada que ver el hecho de que tengan algún tipo de limitación física o mental.

Es muy genial que se les dé la oportunidad y más aún que sea aquí en Columbia. Es muy importante porque nos ayuda a romper con los prejuicios que todas las personas tenemos de manera directa o indirecta, realmente te cambia la visión y te acerca mucho a una realidad distinta a la nuestra.

¿Aprendiste algo que desees subrayar dentro del taller?

El compañerismo. Jamás se negaron a colaborar a la hora de trabajar juntos, no tienen limitaciones. Se notaba muchísimo las ganas que tenían de aprovechar al máximo la oportunidad y de demostrar que no tienen impedimentos, que somos realmente todos iguales.

¿Algunas palabras para los jóvenes que aún no se animan a participar de experiencias como esta?

Yo les diría que aprovechen la oportunidad, ya que es una experiencia única. Es genial porque aparte de aprender con los profesores, que son buenísimos profesionales, podes compartir con personas que te ayudan a crecer muchísimo personalmente, te hacen ver cosas que no veías y eso te hace cambiar de pensamiento.

Para finalizar les digo que no se queden con ese prejuicio y les invito a participar en talleres inclusivos.

Ojalá se sigan realizando, porque es muy bueno ver que se les incluya a personas que cuentan con capacidades diferentes, y que de hecho desarrollan otras capacidades que nosotros capaz jamás desarrollemos.